Hace tiempo que no escribo nada por aquí y creo que ya era hora . . . Este proverbio es muy lógico y tiene toda la razón . . . Siempre (y es norma general de humanos) nos quedamos con la duda respecto a muchos aspectos por el miedo a preguntar, "miedo al ridículo" que nos creemos, y no solo nos convertimos en ridículos a nosotros mismos por esta actitud, sino en tontos . . . perdiéndonos una gran respuesta. Sin embargo, hay gente que no, que es muy "echada para adelante" como se diría popularmente y directamente preguntan . . . deberíamos aprender de ellos y no dejar de perdernos tantas cosas por no preguntar y "ser tontos" durante cinco minutos . . .
Dulce, te lo explicaré en persona cuando viaje a Mexico... ;-)
Cande, bienvenida nuevamente a este espacio que ya te echaba de menos. En verdad es ese "miedo al ridículo" de que hablas el que tantas veces nos retrae de preguntar cosas que podrían traernos una gran dicha o sacarnos de una gran duda. Y créeme (lo digo por experiencia), no existe peor esclavitud en esta vida que ser esclavo de tus propias dudas.
Una vuelta de tuerca a la actualidad, al arte, al cine, a la historia... Todo a través del particular prisma de Frangarod y de un gato encantado de la Luna.
3 comentarios:
Me lo puedes explicar ??? :D
Hace tiempo que no escribo nada por aquí y creo que ya era hora . . .
Este proverbio es muy lógico y tiene toda la razón . . .
Siempre (y es norma general de humanos) nos quedamos con la duda respecto a muchos aspectos por el miedo a preguntar, "miedo al ridículo" que nos creemos, y no solo nos convertimos en ridículos a nosotros mismos por esta actitud, sino en tontos . . . perdiéndonos una gran respuesta.
Sin embargo, hay gente que no, que es muy "echada para adelante" como se diría popularmente y directamente preguntan . . . deberíamos aprender de ellos y no dejar de perdernos tantas cosas por no preguntar y "ser tontos" durante cinco minutos . . .
Dulce, te lo explicaré en persona cuando viaje a Mexico... ;-)
Cande, bienvenida nuevamente a este espacio que ya te echaba de menos. En verdad es ese "miedo al ridículo" de que hablas el que tantas veces nos retrae de preguntar cosas que podrían traernos una gran dicha o sacarnos de una gran duda. Y créeme (lo digo por experiencia), no existe peor esclavitud en esta vida que ser esclavo de tus propias dudas.
Un fuerte abrazo a las dos.
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